Haber sido Rector de la UNSA, en la que tal vez se le recuerde más por haber gestado la construcción del estadio de la Universidad, terminó siendo para el profesor (¿doctor?) Juan Manuel Guillén Benavides, un trampolín para lanzarse a la política. Alcanzó primero la alcaldía de la provincia y luego la presidencia regional de Arequipa.
Desconozco el rendimiento de su gestión y su nivel de aprobación en la población arequipeña. Su intención de reelegirse debe, en todo caso, obedecer a cierto respaldo. Hace unos días, él, junto a otros presidentes regionales del país, salieron a protestar en los medios contra el gobierno por la modificación de una ley que obliga a los alcaldes y presidentes regionales a renunciar seis meses antes de las elecciones si procuran una reelección. Esta preocupación revela, más que un simple desacuerdo por el cambio de "las reglas de juego" como alegan los aludidos, una clarísima preocupación por no poder favorecer su campaña reeleccionista con los recursos públicos que dado sus privilegos, ostentan. Así no es pe, Guillén.
Desconozco el rendimiento de su gestión y su nivel de aprobación en la población arequipeña. Su intención de reelegirse debe, en todo caso, obedecer a cierto respaldo. Hace unos días, él, junto a otros presidentes regionales del país, salieron a protestar en los medios contra el gobierno por la modificación de una ley que obliga a los alcaldes y presidentes regionales a renunciar seis meses antes de las elecciones si procuran una reelección. Esta preocupación revela, más que un simple desacuerdo por el cambio de "las reglas de juego" como alegan los aludidos, una clarísima preocupación por no poder favorecer su campaña reeleccionista con los recursos públicos que dado sus privilegos, ostentan. Así no es pe, Guillén.